No, no he estado un año de vacaciones, ni de año sabático, ni perdida en el Caribe. Ha sido un año lleno de trabajo y acontecimientos varios.
En breve resumo. Regresé de la playa el 31 de julio de 2009 y el 3 de agosto mi casa se convirtió en un infierno. Durante 90 largos días no fue mi casa, pasó a mano de albañiles, fontaneros, electricistas, montadores y por fin entraron los pintores.
En medio de todo este caos, mi hijo me anuncia que “habemus” boda, vamos que se casaba en junio. La boda llegó y a los 10 días del enlace me encuentro de nuevo sacando la toalla, el bañador, la tumbona y la sombrilla y disfrutando de un mes de relax en mi playa favorita, La Antilla.
Os iré poniendo al corriente de mis escarceos con el mundo tejeril en estos meses de infarto.
Andar de obras y de preparativos de boda agota a cualquiera, lo aseguro.
4 comentarios:
¡ Qué sorpresa! Como tengo el enlace de tu blog en el mío, me he dado cuenta enseguida de que has vuelto. ¡pensaba que te habías perdido entre la antilla y Mérida, jeje! Pues me alegro mucho de verte por aquí de nuevo y de ser la primera en darte la bienvenida. Ah y enhorabuena por la boda de tu hijo. Mil besos.
¡Pero que alegría Ana! Pues si que te he echado de menos, me alegro que hayas vuelto. Yo ahora estoy de obras, pero no se me casa ningún hijo (el mayor tiene 10 años, jeje). Pues nada a mover esas agujas y ponernos al día con tus trabajos que son una maravilla. Besos. Rosa.
Bienvenida a internet de nuevo, jajajaja. Lo de los obreros, sin comentarios, un caos. Enhorabuena por la boda de tu hijo. Merecidas vacaciones en esa playita un año después. Un beso. Isa
Ya esta bien sinvergüenza!!! precisamente hoy me andaba acordando de ti... yo tambien te tengo que poner al dia de muuuuchas cosas.
Me ves yendome para Badajoz ya!!
Me alegro de verte por aqui y bien.
besitos
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